Tres años después de su última y primera exposición individual en Valencia, Francisca Mompó ha vuelto a la escena plástica. Y esta vez con una serie arriesgada en la que se muestra como un artista de gran técnica y muy personal. Es en la galería Punto donde expone ahora cerca de una docena de cuadros, tanto de pequeño como de gran formato, realizados sobre alquitranes, y también algunos dibujos. Mompó es una de las colaboradoras habituales de Manuel Valdés -sus obras son equidistantes-, de quien dice ha aprendido mucho. Por ello pasa largas temporadas en Nueva York y donde absorbe toda la vanguardia que le rodea.
"Si he tardado tanto en exponer es porque he estado buscando ofrecer algo diferente y personal: mi sello. Que definiera y tuviera interés para mí y el público. No un producto medio que quede en el olvido. Y creo que ahora lo he conseguido. Pero no tengo prisa. El artista se hace con el tiempo y yo miro a largo plazo.»
Mompó es profesora de dibujo y en su obra está la herencia de los informalistas españoles, pero también a Jasper Johns. La exposición es su reflexión en torno al informalismo matérico por ello el uso de alquitranes y materias. "Si trabajo con alquitranes es porque son cálidos y sugerentes. Es un material. No he querido inventar el material. El alquitrán cambia según su estado. Quiero seguir por ese camino y fabricar una imagen.»